Renacer de la contradicción

No es lo mismo querer con el espíritu que con la materia
Decir voy a cuidar de ti, que cuidarte
Hablar con el corazón o con el ego
Lo intentas, ser pájaro de cosmos
Fenix de guerrerx
espada de justicia
sin embargo
falta la vulnerabilidad de la rama seca
el bosque de árboles moribundos
la sequía de un verano atroz
Se echa de menos, la soledad del alga extinta
el silbido del viento entre las rejas de nuestros pensamientos
el ruido del corazón partido por el golpe certero del egocentrismo
Aparecen los fantasmas de los armarios
el romero pidiendo sanar
y los pies delicados y desorientados de los deseos apegados a la materia
La tierra pasa de vida a muerte y en vez de vegetación, basura, y en vez de peces, pescados y en vez de alquimia, alquitran
Todos y todas queriendo hablar y reafirmar sin sentir la comunión que vive en la nada de nosotrxs mismos y que es la cadena que nos une a otras personas y al cosmos.
Caminantes a la vera del espíritu cargando filosofía con flores artificiales, necesarias en el consumo y la extinción social
Sin embargo
Cantos de todo, símbolos mágicos y gargantas que se acercan a las estrellas,
llenada la vasija con chorros de amor incondicional atravesados por una partitura celestial, con la cuántica del aceite esencial y vuelta al infinito, donde la nada es todo y todo es nada. Donde espíritu y materia forman un tercero y la unidad se completa (por el momento)
Vuelta a renacer