Canto rodado

 

Confundo agua brava y turbia con remanso de paz

y sumida en el recuerdo de un abrazo

me arrastra la corriente

Agua que creí manos que protegen

fue agua de rencor

y cada piedra de mi estima

rodó salvaje perdiendo partes de si misma

como si su único final fuera ser polvo

y yo, no tuviera más menester que partirme en millares

Otra vez estaba nadando en amores perros

aguas de reproches y malos gestos

que ahogan al pez del espíritu

y arañan los ojos y la frente de arrugas

Miraba mi rodar y mi partida con resignación

como si partirme de nuevo

no fuera perder lo chiquito de mi esperanza

y yo, no estuviera más que pulida

y necesitada de orilla y calma