Renacimiento uterino

Me taparon con una manta
Eran tres
Estaba tumbada, agotada
Estaba repleta de sensaciones
Mareada de tantas
Exhausta de libertad
Se habían desplegado todas las posibilidades
Las había cogido
Las había abrazado
Las había absorbido
Hechas carne, piel, huesos, riñones
Había convertido todo mi torrente de sangre en lucha
Corría por mis venas lo tremendo de lo imposible
Salvaje, hablaba sin pensar, hacía sin pensar, me derramaba por cada una de las presentes transfiriendo mi sangre
Renaciendo en ellas
Brillando en ellas
La vida me estaba regalando su belleza sin muros
Su verde sin humo
Su tierra sin asfalto
Yo aprovechaba cada paso de baile para unirme a la danza de lo increible
Escribía, bailaba, gestaba vida, aunque mi barriga era una tabla y mi cabeza un torrente
Inflada de humanidad, conectada con la semilla, brotaban de mi las especies extintas
Soplaba el aire y se cerraban cicatrices terrenales
Más allá de las estrellas, existen más estrellas y están en la tierra cerquita mía
A ras de suelo
En la huerta, en las calles, en las paradas de autobús, detrás de una barra, de un bolígrafo, de unas bragas
Están por todos lados porque las mujeres buenas no construyen muros, los derriban
Tres de ellas, me taparon
Me cubrieron con una mata
Me cuidaron cuando todo estaba hecho y me besaron la frente
Volví a renacer

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